PASIÓN POR VIAJAR VS. MANDATOS SOCIALES

PASIÓN POR VIAJAR VS. MANDATOS SOCIALES

Un tema que siempre ronda en la cabeza de muchos viajeros es nuestra pasión por viajar versus los mandatos sociales. Salir de la zona de confort, animarse a hacer cosas que “la mayoría no elige” o simplemente decidir vivir de otra manera diferente a la considerada “normal” muchas veces no es tarea fácil.

En realidad, para muchos lo que no es tarea fácil es ACCIONAR. Quizás en el fondo sabemos lo que queremos, lo que nos hace felices, lo que nos apasiona. Pero cuesta llevarlo a la práctica. Por qué? Por los benditos “mandatos sociales”.

Me refiero a los mandatos sociales como aquellas “órdenes” que escuchamos desde chicos sobre lo que deberíamos hacer cuando “seamos grandes”. Lo que sería lo “más normal”. Lo que nos enseñan como “verdades” sin cuestionar la existencia de excepciones. O simplemente, sin considerar que todos los seres humanos somos diferentes, pensamos diferente, sentimos diferente y vivimos diferente.

CUÁLES SON ESOS MANDATOS SOCIALES?

Algunos de los mandatos sociales que más he escuchado, de la sociedad en general, son:

1. Hay que estudiar una carrera universitaria, sino «no tendrás futuro”
2. Trabaja duro, y si sobra algún tiempo, recién ahí disfruta
3. Busca un “trabajo estable”
4. Cásate
5. Ahorra para la casa propia
6. Hay que tener hijos
7. Ya estás grande, tenés que «sentar cabeza”
8. Sino lo haces ahora, luego «se te pasará el tren”

Y podría agregar muchos más.

Si hay algo que pude descubrir a través de mi autoconocimiento y mi búsqueda de estar y sentirme mejor es que jamás haré algo para “agradar” al otro o para cumplir con “los deseos de otro”. Podemos escuchar respetuosamente opiniones de los demás, pero son sólo eso, opiniones. Las decisiones de mi vida las tomo yo, porque justamente es mi vida y tengo una sola.

Creo que cada persona en este mundo ELIGE. Y no hay mayor libertad que esa. ELEGIR. Elegir qué queremos para nuestras vidas. Si quiero o no casarme, si quiero o no estudiar, si quiero o no tener hijos. Todas las elecciones implican perder y ganar algo. No podemos tener todo. Pero lo importante es que, con esa elección, la balanza se incline hacia nuestra felicidad.

VIAJAR – PASIÓN Y ELECCIÓN

Por lo ya expuesto, he aquí que los viajeros experimentamos muchas veces esta controversia. Seguimos viajando? Dejamos de “gastar” en viajes para ahorrar para un “futuro”?

Si considerás que viajar es “un gasto” entonces probablemente no sea lo que te hace más feliz. Para mí, viajar es la mejor inversión de mi vida. Jamás lo tomé como una “pérdida”, siempre fue una GANANCIA. Gano experiencias, gano felicidad, gano VIDA.

Desde ese primer viaje descubrimos que viajar nos hace felices. Simple. Lo elegimos. Y nos pasan estas cosas:

• No nos alcanza con viajar una vez al año, cuando “nos dan las vacaciones”. Necesitamos más seguido cambiar de aire y explorar el mundo.
• Volvemos de un viaje y ya estamos planeando (o soñando) el próximo destino.
• Trabajar es para VIAJAR. No es nuestra prioridad comprar un televisor nuevo, una cartera costosa o ahorrar durante 20 o 30 años para la vivienda propia. Es decir, primero el dinero es para viajar. Si sobra, se ve el resto.
• No dependemos de alguien que “nos acompañe” a viajar. Si el otro no puede o no quiere, viajamos solos.
• Quizás no queremos tener hijos, y eso está perfecto también. Tal vez lo dejemos (o no) para más adelante, sólo cuando lo deseemos, y no por la presión de que “se nos vaya la edad”.
• Tal vez estudiamos una carrera universitaria y luego decidamos que esa profesión no nos hace felices. Algunos preferimos buscar una actividad que nos dé mayor libertad, quizás un emprendimiento que nos permita elegir cuándo viajar o un trabajo online que podamos hacer desde cualquier parte del mundo.
• No nos atamos a las cosas materiales. Priorizamos el disfrute, vivir el momento, llevarnos experiencias.
• Sabemos que no tenemos que ser millonarios para poder viajar. Mientras otros trabajan para comprar una casa, cambiar el auto o lo que sea su prioridad, los viajeros trabajan en primer lugar para viajar. Además hay muchas formas de viajar barato como hacer voluntariados o couchsurfing.

Hay algo que dejaste de hacer por cumplir un “mandato social”? Como viajero, te sentís identificado con estas cosas? No se pierdan la experiencia de esta viajera que se animó a romper esos mandatos y cumplir su sueño: «Renuncié a mis trabajos para viajar sola por el mundo».

También te invito a leer mi experiencia: VIAJAR SOLA POR EUROPA.

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