Como todos sabemos, hoy en día está lleno de páginas web o blogs sobre viajes. Entonces, a la hora de crear el mío… Por qué un blog de viajes? Y la verdad es que decidí elegir esta temática por una simple razón: me apasiona viajar y escribir sobre ello.
Además de viajar me apasiona el deporte, la pastelería… Pero hace tiempo tenía muchas ganas de contar de mis viajes. También quería escuchar experiencias de otros viajeros y, por supuesto, aprender. Porque como se dice “viajar” nos enseña, nos “abre” la cabeza. Viajar nos hace conectarnos con nosotros mismos y con los demás…
Pero la idea de este blog es que le sirva no sólo a los viajeros habituales, sino también a aquellos que tengan que elegir un destino para sus vacaciones. Esas vacaciones que están esperando todo el año con ansias. Quizás tienen en vista dos o más destinos y les gustaría saber un poco más de cada uno de ellos para poder decidir dónde viajar. Esto es lo que me ha pasado siempre. Cuando trabajamos todo el año en algún empleo estable no vemos “la hora” de que llegue ese descanso súper merecido. Y empezamos a ver dónde nos podemos ir de vacaciones.
Esto implica un completo análisis… Buscamos vuelos, combinaciones. Vemos los precios promedio de alojamientos. Calculamos el presupuesto de comida por día. Investigamos cuáles lugares podemos visitar por nuestra cuenta o para cuáles necesitamos contratar un tour. Y en este último caso cuánto cuestan esas excursiones y muchas otras cosas más para poder armar EL VIAJE.
En mi caso, en los últimos años, he tenido la posibilidad de dividir mis limitados días de vacaciones para poder viajar más de una vez al año. Y, aunque siempre parece poco, soy una agradecida a la vida de poder haberlo hecho y por supuesto haber elegido y seguir eligiendo algo que, por lo menos a mí, me hace feliz sin importar haber postergado otras cosas. Porque sabemos que cuando “tenemos que elegir” siempre hay algo que se deja atrás. En la mayoría de los casos, todo no se puede.
Por eso, si sos feliz viajando, te invito a acompañarme en este blog de viajes al que llamé Boleto a la Felicidad.